La caja de pruebas en optometría comúnmente viene en un portafolio plateado, el cual contiene herramientas esenciales que el optometrista utiliza para evaluar la visión del paciente.
Dentro de esta caja, se encuentran lentes esféricas y cilíndricas tanto positivas como negativas, lentes con prismas, colusores, una cartilla de prueba de visión cercana y, en algunos casos, reglas milimétricas para realizar mediciones precisas.
¿Qué hay en una caja de pruebas?

- A la izquierda se encuentran las lentes esféricas negativas, organizadas en dos filas en pasos de -0.25 (aunque en algunas cajas, la primera lente puede ser de -0.12) hasta llegar al -20.0, ordenadas de abajo hacia arriba.
- Un poco más a la derecha, se encuentran los cilindros negativos. Estas lentes están disponibles en potencias que van desde -0.12 hasta -6.00.
- A continuación, están las lentes con cilindro positivo, con potencias que van desde +0.16 hasta +6.00.
- Del lado derecho de la caja se encuentran las lentes esféricas positivas, que siguen el mismo patrón de las lentes negativas, comenzando en +0.12 y aumentando progresivamente hasta +20.0.
- En la parte central inferior de la caja, se encuentra el espacio para el armazón de pruebas. Este armazón es ajustable y permite al optometrista colocar varias lentes para realizar una refracción precisa.
Esta organización permite un flujo de trabajo ordenado y eficiente, facilitando el acceso rápido a cada tipo de lente y accesorio durante el examen visual.
Armazón de pruebas
El armazón de pruebas sujeta las lentes de prueba. Coloque las lentes esféricas más potentes en el compartimento más cercano al ojo porque la potencia efectiva de la lente varía con la distancia al ojo.
Las lentes cilíndricas deberán de colocarse en el compartimiento más alejado del ojo para que el eje se pueda medir en la escala del marco de prueba (0–180°).
Retinoscopia de franja
Este es el medio objetivo de determinar el error refractivo en todos los pacientes antes de comenzar una refracción subjetiva. Es el medio principal para determinar la prescripción de anteojos en bebés y personas analfabetas que no pueden dar respuestas subjetivas adecuadas.
Sostenga el retinoscopio a un brazo de distancia del ojo y dirija su haz lineal hacia la pupila. Para determinar el eje del astigmatismo, gire el haz hasta que sea paralelo al reflejo pupilar, luego muévalo hacia adelante y hacia atrás en ese eje.
Si el reflejo se mueve de la misma manera que el haz del retinoscopio ("con movimiento"), se agrega una lente positiva (+) al marco de prueba. Si el reflejo se mueve en la dirección opuesta ("contra el movimiento"), se necesita una lente negativa (-).
La ausencia de "con movimiento" o "contra movimiento" indica el punto final. Agregue −1,50 D a los resultados anteriores para aproximar el error de refracción del meridiano. Gire el haz 90° para refractar el otro eje. Los autorefractores computarizados sirven para realizar la misma tarea.
Pruebas subjetivas
Coloque los lentes aproximados, según determinen las gafas antiguas o la retinoscopia, en una montura de prueba. Ocluya uno de los ojos del paciente y refine la esfera mediante la adición de lentes (+) y (-) 0,25 D. Pregunte qué lente hace que la letra sea más clara.
A continuación, refine el eje del cilindro girando la lente en la dirección de visión más clara. Pruebe la potencia del cilindro agregando cilindros (+) y (-) en ese eje. En pacientes présbitas, determine la lectura “agregar” después de la corrección de distancia.
Se mide la distancia interpupilar tanto de cerca como de lejos, de forma que el eje visual central de los ojos se corresponda con los centros ópticos del cristalino. Luego se determina la altura bifocal para el marco en particular.
Los lentes de plástico generalmente se recetan porque son más livianos y tienen menos posibilidades de romperse. Esto es especialmente importante en los niños. Las lentes se hacen más gruesas en las gafas de seguridad ocupacional.
El vidrio tiene la ventaja de ser más resistente al rayado. Para la fotofobia, a menudo se prescriben tintes grises porque distorsionan todos los colores por igual.
Los lentes polarizados minimizan el deslumbramiento al conducir, navegar o esquiar al bloquear las ondas de luz horizontales.
Los lentes de vidrio fotocromáticos se oscurecen con la luz del sol y tienen un filtro ultravioleta. Las lesiones deportivas, especialmente en baloncesto, béisbol, hockey sobre hielo y juegos de raqueta, son una de las principales causas de ceguera en los niños. Las gafas protectoras podrían prevenir el 90 % de estas lesiones relacionadas con los deportes.